Fragmentos de corriente

Todos los referéndums son aplicaciones válidas de la falacia del falso dilema. Cada vez que se convoca uno, la democracia se desvanece.

La realidad es humilde. A veces conviene vivir en tercera persona, un paréntesis entre soberbia y resignación.

Llevar la contraria a la entropía, consumiendo, malgastando una energía inmensa atenta contra el medio ambiente, según la niña malhumorada. La otra mitad lo vive irónicamente. El fantasma de mi pasado se ríe de todos nosotros.

Quien pesca con anzuelo es un contemplativo. Mis pensamientos se depositan ahora en el diccionario. Simpatizo con aquellos que no consiguen pensar si sienten el cuerpo. Siento que mis lecturas se reducen a la inmensidad que se exhibe ante un auditorio vacío.

Sepultado por el cieno del porqué. Hoy no he visto a ningún geek. La soledad te hace pensar que eres más listo de lo que eres. Ante la mínima interacción social surge la duda incómoda. Nadie vive razonablemente convencido, sino razonablemente persuadido.

La prensa abusa de la coma de elipsis. Recuerdo a periodistas y tertulianos que, aparte de 'protocolo', también pueden utilizar 'trámite' o 'procedimiento'.

Se estaba mejor cuando se estaba peor. Y viceversa.

«Gracias a nuestro sistema sanitario universal, por mucho que su marido maltrate su cuerpo, lo pagará otra persona», oigo que le dicen a Marge.