Desplazamientos

A todo individuo le sigue una sombra (…) Si las tendencias reprimidas de la sombra no fueran más que malas, no habría problema alguno. Pero, de ordinario, la sombra es tan sólo mezquina, inadecuada y molesta, y no absolutamente mala.

Jung. Psicología y religión.

"Al llegar cerca de un farol esa impresión desaparece momentáneamente, las cosas se hacen más tangibles y menos interesantes, y al quedar atrás la luz artificial vuelven poco a poco a integrarse al misterio. Se me ocurre que la verdad profunda de las cosas es necesariamente difusa, imprecisa, inexacta; que el espíritu se alimenta del misterio y huye y se disuelve cuando lo que llamamos precisión o realidad intenta fijar a las cosas en una forma determinada —o en un concepto.
        

(...) En mi camino de regreso a la casa encontré que todo había vuelto a su opacidad cotidiana, y que incluso las cosas tenían un tinte siniestro, algo más que su propia vulgaridad, como una forma de vulgaridad desafiante, prepotente o burlona."

Existe un cine narrativo y otro poético. Prefiero el segundo. Basada en la novela homónima del maestro Mario Levrero, un hombre extraño parece haber heredado de su padre algunas viviendas por lo que se ve obligado a acometer la tarea de cobrar los alquileres. Una extraña sombra lo acompaña en su deambular por largos laberintos de habitaciones, patios, corredores inundados y extraños personajes. Una extraordinaria película de Pedro Stocki, un poco conocido cineasta argentino nacido en 1936.