Chile
Estos mesías son hombres nuevos pasados de moda, ya viejunos.
El idealismo convierte en porquería lo real.
Hay quien se indigna porque la lámpara de Aladino no funcione.
El buenismo es una vía directa, ingenua, cursi, infantil, contraproducente.
Defienden su verdad con mentiras porque para ellos ganar es más importante que defender la verdad.
El voluntarismo nos hace creer que querer es igual a poder y a deber.
Todos se ponen de acuerdo en la necesidad de reformar, pero no en qué y cómo hacerlo con los medios disponibles.
Es más fácil destruir que construir.